Durante los últimos días tal vez hemos escuchado esta palabra en noticieros, webinars, artículos, en conversaciones con nuestros amigos y con nuestros familiares. Y esto me puso a pensar y reflexionar el por qué nosotros los seres humanos sentimos esta emoción y cómo la podemos enfrentar…
Primero me puse a la tarea de consultar en Internet, qué es la incertidumbre y algo que encontré allí fueron 16 palabras que son sinónimos de esta:
- Duda
- Dubitación
- Vacilación
- Titubeo
- Indecisión
- Desasosiego
- Intranquilidad
- Ansiedad
- Zozobra
- Recelo
- Sospecha
- Irresolución
- Inseguridad
- Inquietud
- Suspicacia
- Desconfianza.
También encontré una definición interesante “La incertidumbre se refiere a anomalías epistémicas que implican información imperfecta o desconocida. Se aplica a las predicciones de eventos futuros, a las mediciones físicas que ya se han realizado o a lo desconocido. La incertidumbre surge en entornos parcialmente observables y/o estocásticos, así como debido a la ignorancia, la indolencia o ambas. Surge en cualquier número de campos, incluyendo los seguros, filosofía, física, estadística, economía, finanzas, psicología, sociología, ingeniería, metrología, meteorología, ecología y ciencias de la información.”
Esta última parte, me causó curiosidad pues si nos damos cuenta es algo propio, incluso, de las ciencias exactas como las matemáticas, ellas dejan, a pesar de su precisión, un espacio para tenerla en cuenta para medirla, y cuando lo vi pensé que podía ser una forma de solucionar la incertidumbre que sentimos en ciertos momentos de nuestra vida, matemáticamente dicen que:
La incertidumbre relativa se obtiene dividiendo la incertidumbre absoluta entre un valor medido y multiplicando por 100 para obtener un porcentaje. Por ejemplo:
(6 cm ± 0,2 cm) = (0,2 / 6) x 100
y agrega un signo de % para un resultado en este ejemplo de 3,33%.
Pero la verdad es que más allá de entender como medirla o sus sinónimos, la invitación es a concientizarnos de que la incertidumbre es algo que siempre estará presente en todas las áreas, decisiones y situaciones que trabajemos en nuestras vidas.
Y es por que tu cerebro ante cualquier cambio elegido por cuenta propia o impuesto por otro, reacciona de forma inconsciente rechazando dicho cambio o las acciones que deben ejecutarse para lograrlo, al cerebro no le gusta salir de su zona de confort y por eso hace lo necesario para que nos mantengamos allí, en lo conocido.
Si bien es cierto la incertidumbre siempre está presente, también lo es que cada ser humano reacciona de forma diferente ante este tipo de situaciones y esto tiene que ver en donde centramos nuestras emociones, es decir, desde donde nos movemos ante la posibilidad de un cambio.
Existen tres bases fundamentales y tienen relación con la teoría del cerebro triuno de Paul MacLean:
- Algunas personas ante la incertidumbre de los cambios toman acción y los enfrentan, no esperan que pase algo, ellos hacen que pasen cosas, se podría decir también que luchan ante esta situación. Lo negativo de esta forma de afrontar la incertidumbre, es que salen a enfrentar sin planear de forma adecuada o sin mapear el para qué de las acciones que van a ejecutar. Paul MacLean, describe esta forma de actuar como personas donde el cerebro reptiliano es el más predominante en ellos.
- Por otra parte, están las personas que ante los cambios prefieren huir, entiéndase el hecho de buscar un lugar seguro donde resguardarse con el fin de evitar vivir emociones negativas o posibles perdidas de cualquier tipo debido al cambio en sí. Este grupo de personas es mas dominado por el cerebro límbico.
- Por último está el grupo de personas que están más dominadas en su forma de actuar por el cerebro neocórtex, que es el cerebro del análisis. Es decir, que ante situaciones de cambio su forma de actuar es través del ponderar los pro y contra de la situación, planear detalladamente las acciones, quedándose en este proceso y no actuando de forma rápida.
La invitación es a identificar desde donde generas tu actuar primario y gestionarlo de una manera asertiva:
- Reptiliano: Analizando las situaciones y planeando las acciones correspondientes con estrategia, sin dejar de lado el actuar rápido.
- Límbico: Teniendo claro el propósito y la dirección hacia donde te diriges o de lo contrario cualquier camino te servirá.
- Neocortex: Mezclando el análisis y la seguridad con la toma de acción rápida.
Por último, recordemos que la incertidumbre siempre estará presente y que las emociones que esta genera pueden ser positivas o negativas, vívelas, identifícalas y gestiónalas asertivamente.